Arj,
hace tiempo ya comentaba como unos colegas se van , otros vienen. Más que nada por diferencias de caracteres y porque cada uno tira para su lado. Hasta ahí perfecto.
El problema es cuando hay amigos a los que tienes mucho aprecio, y por circunstancias (es decir, trabajo) tienen que pirarse de donde vives tu.
Y es que hoy me ha llamado un amigo comentándome que le había salido mun trabajo en Madrid. Genial. El mejor compañero que he tenido en la universidad, que ha aguantado carros y carretas conmigo, pues nada, a Madrid.
Si, ya se que me vais a decir que si puedo ir a visitartle, que si 5 horas no son nada etc etc. Ya lo engo muy comprobado que los kilómetros no son distancia, pero si la rutina. Es la gran demoledora de amistades.
Se que con el amigo este, la amistad no se va a perder nunca, por como soy yo y como es él, pero echaré de menos las enormes viciadas al warcraft3 estando en la misma habitación (ver su cara de derrota es lo mejor del mundo, juas).
Azkenean laguntasunak ez dauka inolako mugarik, bainan egunerokoa, eguneroko gauzatxo horiek izaten ohi dira gehien faltan dituzunak egunak joan ahala. Zer egingo diogu ba, horrelakoa da bizitza.
Batzuk joan, besteak etorri, auskalo non amaituko dudan nik. Baina ezjakintasun honek ez nau batere konforme uzten.
Hala pues, ondo segi.
PD: El campeonato de mundaka de surf se salió. Menudas dos olazas que vi de Luke egan, una de 8 y otra de 8,2 :-)
Escrito por Txus a las 8 de Octubre 2004 a las 08:43 PM